La dura historia de Nodejo tiene el mismo comienzo que la de sus 59 compañeros Pastores Alemanes. Provienen de una incautación en el 2017. Rescatados de las deplorables condiciones de habitabilidad en las que se encontraban. Salvados con la esperanza de una segunda oportunidad.
Cada perro era diferente, pero en todos se reflejaba el infierno que habían dejado atrás. Nerviosos, bloqueados, asustadizos. Su mirada perdida lo decía todo. Cada intento de acercamiento, cada palabra de cariño, parecía no poder penetrar en el corazón ya dañado de estos maravillosos animales.
Nodejo llegó a ANAA con miedo y evitando el contacto humano. Así paso mucho tiempo, pero nunca cesamos en nuestro empeño de demostrarle que la bondad existe. Poco a poco su espíritu de perro valiente fue rompiendo la coraza. Una caricia, una correa, un paseo, un amigo. Hasta que llegó por fin el ansiado momento. Nodejo estaba preparado para encontrar un hogar definitivo. Y ese maravilloso día llego, junto con unos amigos llenos de bondad.
Su actual familia adoptante nos cuenta cómo va superando sus miedos. Como ha pasado de asustarse de su imagen en el espejo a correr feliz tras las olas. Como miraba con desconfianza una caricia para después acercarse en busca de más afecto. Como se relaja en su cama tras un día agotador y repone fuerzas para disfrutar de su hogar. De su familia.
La historia de Nodejo es un final feliz en el que podría decirse que se ha hecho justicia, pero solo a medias. El caso no estará cerrado hasta que todos los perros encuentren el hogar que merecen. Tu puedes ayudarlos. Adóptalos. Y salva vidas.
